All Aboard The Hot Mess Express: Self-Care Tips for Real People

Todos a bordo del Hot Mess Express: consejos de cuidado personal para personas reales

Se supone que todos debemos tener una rutina perfecta de cuidado personal, ¿no? Una tranquila práctica de yoga, escribir un diario a la luz de las velas, beber té de hierbas como si fuéramos la estrella de un anuncio de Instagram. Pero seamos realistas: la vida es un caos . Los platos se acumulan, tenemos un millón de plazos y encontrar tiempo para hacer algo por ti puede parecer un sueño lejano. Pero el cuidado personal no se trata de hacer las cosas perfectas, se trata de encontrar pequeños momentos de cordura en el caos.

Entonces, hablemos del verdadero cuidado personal, el tipo de cuidado que puedes hacer cuando tu vida está patas arriba.

1. Plan de escape de cinco minutos

¿Quién dijo que el autocuidado tiene que ser una sesión de meditación de una hora? A veces, tienes 5 minutos. Cuando el mundo esté dando vueltas, respira profundamente unas cuantas veces (en serio, ahora mismo) : inhala profundamente y exhala lentamente. Céntrate en medio del caos. Me gusta llamarlo mi "mini-reinicio". Es una forma rápida de recordarte a ti mismo que, aunque las cosas parezcan caóticas, aún puedes encontrar la paz con una sola respiración.

2. Diga “no”: una frase completa

Vivimos en un mundo al que le encanta glorificar el ajetreo, pero seamos claros: no tienes que decir que sí a todo. De hecho, algunos de los mejores momentos de autocuidado surgen de decir un NO rotundo y sin culpa. Los límites son sexys, ¿vale? Tu tiempo es valioso y no es egoísta protegerlo. Piensa en el "no" como un acto de rebelión contra el exceso de compromisos. Y además: es gratis.

3. El baño desordenado

Ah, el baño de burbujas. El ritual de autocuidado al que todos recurren. Pero aquí hay un secreto : a veces el agua está demasiado caliente, las burbujas se desinflan y te quedas mirando el teléfono en lugar de relajarte. ¡ Y eso está bien! El baño no tiene que ser perfecto, pero puede ser un momento para sentarse a pensar en uno mismo. Incluso si tu niño está golpeando la puerta o tu pareja te pregunta sobre los planes para la cena, al menos te quedaste con esos 10 minutos.

4. Déjalo ser feo

Muchos de los consejos de cuidado personal que hay por ahí hacen que parezca que hay que tenerlo todo bajo control: el cuidado de la piel, las afirmaciones, el batido verde matutino. Pero, ¿qué pasa si tu versión de cuidado personal consiste en mirar un reality show sin parar mientras comes cereales a medianoche? Genial, acéptalo. El cuidado personal no es igual para todo el mundo. A veces, la curación es fea. Es gritar en una almohada, escribir pensamientos confusos en un diario o poner música a todo volumen y bailar en pijama como si hubieras perdido la cabeza. Deja que sea confuso, sigue siendo válido.

5. Celebre sus pequeños triunfos

¿Te levantaste de la cama hoy? Aplaude por ti mismo. ¿Enviaste ese correo electrónico que has estado evitando? Eso es un triunfo. La vida es muy intensa a veces, y el cuidado personal no siempre significa cambiar tu rutina. Puede significar sobrevivir el día con gracia (o sin ella, honestamente). Si todo lo que hiciste hoy fue respirar, todavía estás avanzando.

6. Háblate a ti mismo con amabilidad

Escucha, nosotros somos nuestros peores críticos. ¿Esa voz en tu cabeza? Puede ser cruel. Pero ¿qué tal si practicaras hablarte a ti mismo como lo harías con un amigo ? Cuando tus pensamientos comiencen a volverse negativos, haz una pausa. Pregúntate: "¿Le diría esto a alguien a quien amo?". Si la respuesta es no, es hora de reescribir el guion. Sí, lo sé, es más fácil decirlo que hacerlo, pero confía, vale la pena.

7. Deja de seguir el ruido

Las redes sociales son geniales... hasta que dejan de serlo. Si tu muro te hace sentir inferior o te hace compararte constantemente, pulsa el botón de dejar de seguir. No necesitas esa energía en tu vida. En cambio, sigue cuentas que te hagan sentir empoderado, inspirado o que te hagan reír. Protege tu espacio digital: también es parte de proteger tu espacio mental.

8. Llora por tu antiguo yo

No hablamos lo suficiente sobre cómo parte del autocuidado es aceptar que no eres la misma persona que solías ser. Tal vez hayas pasado por algunas cosas últimamente (¿acaso no nos ha pasado a todos?). Dejar ir la versión de ti que lo tenía todo resuelto y aceptar a la que está aprendiendo, creciendo y tropezando en el camino: eso es el verdadero autocuidado. No se trata de arreglarte a ti mismo; se trata de aceptar quién eres, ahora mismo .

9. Encuentra tu alegría, incluso si es un caos

No tiene por qué ser algo grande o digno de Instagram. El cuidado personal puede consistir en sentarse en el coche después del trabajo y escuchar a todo volumen tu canción favorita, o leer algunas páginas de un libro que llevas tiempo queriendo leer. Tal vez pintar, aunque el resultado final parezca más abstracto que una obra maestra. El objetivo es encontrar lo que llena tu alma, con todo y el desorden.

El cuidado personal en el mundo real no se parece a lo que nos han vendido. Es crudo, imperfecto y, a veces, francamente caótico. Pero eso es lo que lo hace hermoso. No esperes a que todo sea perfecto para cuidarte. Comienza ahora, con el tiempo, el espacio y la energía que tengas, y deja que el resto se desarrolle solo.

¡Abraza el caos y cuídate! 💛

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